Quantic Love (Sonia Fernández-Vidal)

¿Qué relación tiene la ciencia con el sentimiento más universal de la humanidad? ¿Amar se puede explicar a través de la física? Todas estas preguntas y muchas otras tienen respuesta en Quantic Love, una historia de amor y ciencia protagonizada por una chica y dos chicos que pasan el verano en el CERN, el Centro de Investigación Nuclear de Ginebra. Un triángulo amoroso con el que viviremos una historia apasionante y emotiva y con la que además descubriremos el interior de los laboratorios y la realidad de los científicos actuales. Quantic Love es la novela que resuelve la ecuación del amor.

Reseña:
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Hace apenas unos días que salió publicado este libro y ya me he apresurado a devorarlo, pasando una tarde bastante divertida.


La historia empieza del mismo modo que termina: un viaje en avión. Laila, su protagonista de 18 años, va al CERN, en Suiza, a trabajar. Pero no se codeará entre científicos, sino que la chica en busca de dinero, deberá trabajar en una cafetería. Laila no tarda en conocer gente, entre la que se hará un hueco de un forma muy (muy, pero que muy) rápida, donde surgirán amistades y amor.


No voy a negarlo, la trama acaba siendo de lo más simple. Triángulo amoroso, adolescente dudosa y sin ninguna experiencia en nada, ahora te quiero, ahora no... Pero lo que me ha encantado y la ha hecho diferente, ha sido el punto que da la ciencia a toda la trama. Siempre surge alguna anécdota curiosa sobre la élite científica, dando un toque divertido a la ciencia; hay explicaciones sobre datos curiosos de la física, que acaban siendo aplicados a la vida real de la manera más extravagante... ¿Quién diría que el colapso de la función de onda pudiese tener algo que ver con las relaciones adolescentes?

No me pasó por alto que Alessio se esforzase en catalogar a Brian de "simple amigo". Sin duda, él había notado la atracción que ejercía en mí aquel científico. Por mi propio bien, tenía que escapar de su campo gravitatorio.
Maldita gravedad.

La novela está dividida en treinta y dos capítulos cortos. El avance es muy rápido, yendo al grano a lo importante en todo momento. Supongo que por eso me pareció que la adaptación de Laila avanzaba tan deprisa, aunque al final de la acción (exceptuando el epílogo) hayan pasado menos de un mes. 


Los personajes han sido un gran punto a favor. Aunque Laila resulte un poco sosa y sin una pizca de iniciativa propia, ahí está Angie para sacarla del pozo. Quien en un principio parece el topicazo de "la compañera de cuarto barbie-viva-la-vida" acaba siendo una curiosa mezcla entre un cerebro prodigioso y una forma de ser de lo más extrovertida. Creo que ha sido el personaje que más personalidad ha tenido.


Por otra parte tenemos a Alessio, un periodista que empieza destacando por su impulsividad y su carácter divertido, aunque hacia el final se aprecian unos cambios de humor muy drásticos en él, y Brian, un científico que Laila conocerá en una visita guiada, frío como ninguno.


Sobre la historia romántica, dado que es el centro de la trama, no diré mucho. Es bastante común y algo edulcorada pero, de una forma u otra, es la que consigue mantenerte pegado a las páginas deseando ver qué pasará a continuación.


Ha habido cierta escena que me ha recordado peligrosamente a la novela La gramática del amor, por temas de lugar, situación y pensamientos de su protagonista. Si os decidía a leer la novela tal vez comprendáis de lo que hablo (o verifiquéis que comienzo a ver cosas donde las hay xD).

La edición está bastante cuidada, con la imagen de ese átomo (de núcleo un corazón) en los encabezamientos de capítulo o las páginas que muestran la imagen de lo que sería una Moleskine como la que acompaña a Laila en todo ese verano. Además, la portada me gusta bastante (más que las otras dos que se propusieron y sometieron a votación por Internet).


Se nota que la escritora está muy documentada sobre todo el tema de la física y habla de ellos entre todas las páginas de la manera más natural, sin tecnicismos que nos pierdan. Como detalle curioso, se suma al avance de la historia el acontecimiento que levantó polémica en el CERN hace relativamente poco con los famosos neutrinos que superaron la velocidad de la luz.


En definitiva: Quantic love es una historia divertida, en la que se nos introduce la ciencia de la forma más amena. Aunque la parte romántica sea ya un poco manida en la literatura juvenil, la situación y palabras de la autora marcan la diferencia. La novela avanza con velocidad y los personajes tienen, en su mayoría, bastante personalidad. 

Gravitation is not responsible

for people falling in love

- ALBERT EINSTEIN -

La autora:
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Sonia Fernández-Vidal (Barcelona, 1978) se licenció en física por la Universitat Autònoma de Barcelona. En 2010 defenderá su tesis doctoral en Información y Óptica Cuántica.


Hasta el pasado 2009, ha trabajado como investigadora en la Universidad Autónoma de Barcelona en el proyecto español de Óptica e Información Cuántica. Ha combinado la investigación con otra de sus pasiones; la docencia, tanto en la universidad como en centros para adultos.


Durante los últimos dos años ha dado múltiples charlas de introducción a la física cuántica a públicos no científicos con el objetivo de abrir las consciencias de la gente a distintas realidades.


Su primera novela, La puerta de los tres cerrojos, publicada por la editorial la Galera, va ya por su 6ª edición y cuenta con más de 60.000 lectores. 


Datos:
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Título: Quantic love
Autor: Sonia Fernández-Vidal
Editorial: La Galera
Precio: 17,95€
Páginas: 235
Puntuación: 3,5/5  Interesante


BSO:
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Otros:
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• Visita la página web de la novela.

¡Muchas gracias a la Galera por el ejemplar!